Una ambulancia tarda más que una pizza

Todos tenemos ciertas calles por las que pasamos a diario o casi diario, ya sea camino al trabajo, escuela o cada y a fuerza de costumbre memorizamos cada comercio y hasta a las personas que son parte del lugar. El pasado día jueves yo caminaba por una de estas calles (que, por cierto, es bastante concurrida) cuando descubrí un detalle que no conocía del rumbo y que me llenó de coraje y frustración.

La escena sucedió así: yo caminaba por la calle con mi madre y sobre la banqueta había un joven tirado, primero mi madre paso de largo porque, tristemente, la ciudad esta llena de vagabundos a los cuales uno prefiere no acercarse, pero me dí cuenta de que no era un vagabundo y nos acercamos a para ayudar. Parecía que convulsionaba.

Al acercarnos otras personas que miraban la escena también se acercaron, (algunos preguntaron si el chico estaba borracho) y me dijeron algunas cosas; primero que a veces los del 911 no quieren enviar ambulancias porque piensan que es una broma, por eso tienen que llamar varias personas, segundo que el chico ya tenía ahí un tiempo y antes que nosotras otras personas llamaron para pedir una ambulancia, y tercero, el joven sube a los autobuses a pedir dinero regularmente porque sufre de una enfermedad por la cual no coordina o algo así.

Obviamente todos llamamos al 911, fueron tal vez unas 5 llamadas y después de responder algunas preguntas base todos recibimos prácticamente la misma respuesta, que ya conocían al chico porque anda por la zona y le pasa eso a menudo (las convulsiones), ya habían enviado una ambulancia y una patrulla. No nos dijeron si debíamos sentarlo, darle alcohol a oler o alguna cuestión como esa y yo no pude más que arrepentirme de no haber tomado el curso de primeros auxilios que dieron en mi preparatoria.

Durante el tiempo que mi madre y yo esperamos no llegó ni la patrulla ni la ambulancia, (pasó una hora aproximadamente solo en lo que estuvimos ahí) después unos amables estudiantes se quedaron a esperar y no supe que sucedió con aquél pobre hombre después.

El suceso me llenó de dudas, ¿por qué el joven sale solo ? ¿ tiene una familia que lo cuide? y en caso de que no la tenga o ésta no cuente con los recursos para atenderlo, ¿no es la obligación del gobierno brindarle un tratamiento digno en vez de un “ah si, ya lo conocemos”?. Entonces pienso en la beca que tengo y en la de mis amigas, claro que ayuda, pero ninguna de nosotras dejaría de estudiar si no la tuviéramos, y lo mismo pasa con otros apoyos gubernamentales como 60 y más  en los cuales muchos de los recursos no llegan precisamente a personas necesitadas, pero si todos nosotros dejáramos de ocupar estos programas, todo el presupuesto que quedaría disponible ¿creen llegaría a las personas indicadas, como este joven?

1 comentario en “Una ambulancia tarda más que una pizza”

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    El hecho real, la situacion lamentable.vivimos en una jungla en la que sobrevive el mas fuerte, mas preparado y/o el mas mañoso. La vida no es como el colegio,( no digo colegio no sirva) y el gobierno no presisamente se maneja conforme marcan las leyes,Yo creo que actualmente vivimos en una sociedad que ha perdido muchos valores y entre ellos el respeto por la vida en general. Sin embargo te felicito porque tuviste la vision humanitaria lo cual indica que eres de las pocas personas que aun conservan el sentido por la vida.

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