Por Max Santana*
1985
Marzo 9
Hoy decidí entrar al ejército, mi padre es capitán de una tropa de soldados, justo ahora está en combate.
Me uní al ejército para ser como él y seguir todos sus pasos, en dos días estaré en el campo junto a mi padre, no puedo esperar para verlo. Otra razón por la que me enliste fueron las mujeres, papá conoció a mamá al terminar su servicio. Espero tener la misma suerte.
Marzo 11
Acabo de llegar al campamento pero no veo señales de mi padre, lo único que he visto son cientos y cientos de cuerpos que traen de distintos lugares, el olor a muerte se respira por doquier, miles de heridos son atendido, pocos logran sobrevivir. Pero su suerte está echada, ya que son enviados a pelear de nuevo. Creo que prefieren morir antes que volver a ese infierno.
***
Han pasado 6 horas desde mi llegada y aún no veo a mi padre, estoy empezando a perder la fe de que siga con vida, los cuerpos y heridos no dejan de venir, es horrible.
Por fin, es hora de irme.
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Marzo 13
Estos dos días fueron una pesadilla. Por un día caminamos terreno enemigo, al segundo día fue una lluvia de balas y muertos, soldados enemigos y aliados gritando por ayuda, la sangre bañaba desde mis botas hasta el rostro. Ahora estamos en un pequeño fuerte que construyó Johnson, un chico dos años mayor que yo, gracias a él no moriremos de frío esta noche…
***
Es muy tarde, Johnson está de guardia conmigo, a pesar de que yo estoy muy angustiado, él se mantiene firme como una piedra. Es como si no le importara morir.
Marzo 14
Durante la noche nos despertamos a pelear por nuestras vidas. Un grupo de soldados enemigos descubrió el fuerte y atacaron, dos de los nuestros fueron heridos, tuvimos que irnos de ahí lo más rápido posible y buscar refugio.
Es mediodía, el calor es insoportable y no tenemos agua suficiente, mucho menos un techo para descansar. Preferiría morir ahora mismo pero tengo que ver a mi padre primero, es lo único que me da fuerzas para continuar con esto.
***
Hola Mike, soy Jonhson. No te enojes porque tomé prestado tu diario, ¿Si? En cuanto todo esto acabe, te presentaré con unas amigas de mi cuidad.
Marzo 15
Mientras dormía, el idiota de Johnson escribió en mi diario, de no ser por su idea ya le hubiera disparado dos veces.
Creí que estábamos perdidos cuando nos quedamos sin agua y comida, pero un pequeño campamento de aliados estaba frente a nosotros. Todos dejamos nuestras cosas para comer y beber algo, después de cuatro días sin nada en el estómago creo que era algo merecido.
* Max Santana. Estudiante de preparatoria con un pie fuera de ella. Amante del terror y el suspenso; imprime un poco de ese gusto en sus historias.
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