Herman Melville

Moby Dick

Ensayo sobre el narrador como náufrago en un ballenero

Hay una cosa que me intriga de manera particular en Moby Dick: el narrador. El primer capítulo de la novela comienza con una de las líneas más conocidas del libro: “Llamadme Ismael”. El narrador se autonombra, y así podríamos pensar que “Ismael” es sólo un seudónimo. No dice “Soy Ismael” o “Mi nombre es Ismael”. Dice “llamadme”; el narrador se esconde tras un seudónimo. Sin embargo, quizá lo más relevante sea el efecto de verosimilitud, de existencia subjetiva, que produce la voz: “llamadme Ismael” remite a alguien. No es un yo metafísico. No es, como se dice, un narrador omnisciente